Hora Intermedia
V. Dios mío, ven en mi auxilio.
R. Señor, date prisa en socorrerme.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre,
por los siglos de los siglos. Amén.
HIMNO
No me mueve, mi Dios, para quererte
el cielo que me tienes prometido;
ni me mueve el infierno tan temido
para dejar por eso de ofenderte.
Tú me mueves, Señor; muéveme el verte
clavado en esa cruz y escarnecido;
muéveme el ver tu cuerpo tan herido;
muévenme tus afrentas y tu muerte.
Muéveme, al fin, tu amor y en tal manera
que, aunque no hubiera cielo yo te amara,
y, aunque no hubiera infierno te temiera.
No me tienes que dar porque te quiera;
pues, aunque lo que espero no esperara,
lo mismo que te quiero te quisiera.
SALMODIA
Ant.1. Han llegado los días de penitencia; expiemos nuestros pecados y salvaremos nuestras almas.
Salmo 22
EL BUEN PASTOR
El Cordero los apacentará y los guiará a los manantiales de las aguas de la vida (Ap 7, 17).
El Señor es mi Pastor, nada me falta:
en verdes praderas me hace recostar;
me conduce hacia fuentes tranquilas
y repara mis fuerzas;
me guía por el sendero justo,
por el honor de su nombre.
Aunque camine por cañadas oscuras,
nada temo, porque tú vas conmigo:
tu vara y tu cayado me sosiegan.
Preparas una mesa ante mí,
enfrente de mis enemigos;
me unges la cabeza con perfume,
y mi copa rebosa.
Tu bondad y tu misericordia me acompañan
todos los días de mi vida,
y habitaré en la casa del Señor
por años sin término.
Ant. Han llegado los días de penitencia; expiemos nuestros pecados y salvaremos nuestras almas.
Ant. 2. «Por mi vida —oráculo del Señor—, no quiero la muerte del pecador, sino que se convierta de su conducta y que viva.»
Salmo 75
ACCIÓN DE GRACIAS POR LA VICTORIA
Verán al Hijo del hombre venir sobre las nubes del cielo (Mt 24, 30).
I
Dios se manifiesta en Judá,
su fama es grande en Israel;
su tabernáculo está en Jerusalén,
su morada en Sión:
allí quebró los relámpagos del arco,
el escudo, la espada y la guerra.
Tú eres deslumbrante, magnífico,
con montones de botín conquistados.
Los valientes duermen su sueño,
y a los guerreros no les responden sus brazos.
Con un bramido, oh Dios de Jacob,
inmovilizaste carros y caballos.
Ant. «Por mi vida —oráculo del Señor—, no quiero la muerte del pecador, sino que se convierta de su conducta y que viva.»
Ant. 3. Empuñando las armas de la justicia, hagámonos recomendables a Dios por nuestra paciencia
II
Tú eres terrible: ¿quién resiste frente a ti
al ímpetu de tu ira?
Desde el cielo proclamas la sentencia:
la tierra teme sobrecogida,
cuando Dios se pone en pie para juzgar,
para salvar a los humildes de la tierra.
La cólera humana tendrá que alabarte,
los que sobrevivan al castigo te rodearán.
Haced votos al Señor y cumplidlos,
y traigan los vasallos tributo al Temible:
él deja sin aliento a los príncipes,
y es temible para los reyes del orbe.
Ant. Empuñando las armas de la justicia, hagámonos recomendables a Dios por nuestra paciencia.
TERCIA
LECTURA BREVE 1 Ts 4, 1. 7
Hermanos, por Cristo Jesús os rogamos y exhortamos: Habéis aprendido de nosotros cómo proceder para agradar a Dios; pues proceded así y seguid adelante. Dios no nos ha llamado a una vida impura, sino sagrada.
V. Oh Dios, crea en mí un corazón puro.
R. Renuévame por dentro con espíritu firme.
ORACIÓN
Señor Dios, que reconcilias contigo a los hombres por tu Palabra hecha carne, haz que el pueblo cristiano se apresure, con fe viva y con entrega generosa, a celebrar las próximas fiestas pascuales. Por nuestro Señor Jesucristo.
SEXTA
LECTURA BREVE Is 30, 15. 18
Así dice el Señor, el Santo de Israel: “Vuestra salvación está en convertiros y en tener calma; vuestra fuerza está en confiar y estar tranquilos.” El Señor espera para apiadarse, aguarda para compadecerse; porque el Señor es un Dios recto: dichosos los que esperan en él.
V. Aparta de mi pecado tu vista.
R. Borra en mí toda culpa.
ORACIÓN
Señor Dios, que reconcilias contigo a los hombres por tu Palabra hecha carne, haz que el pueblo cristiano se apresure, con fe viva y con entrega generosa, a celebrar las próximas fiestas pascuales. Por nuestro Señor Jesucristo.
NONA
LECTURA BREVE Dt 4, 29-31
V. Mi sacrificio es un espíritu contrito.
R. Un corazón quebrantado y humillado tú no lo desprecias.
ORACIÓN
Señor Dios, que reconcilias contigo a los hombres por tu Palabra hecha carne, haz que el pueblo cristiano se apresure, con fe viva y con entrega generosa, a celebrar las próximas fiestas pascuales. Por nuestro Señor Jesucristo.
CONCLUSIÓN
V. Bendigamos al Señor.
R. Demos gracias a Dios.
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